Dime Que Comes y Te Diré Que Piensas
El cuerpo es tan asombro que diariamente realiza grandes cantidades de activaciones en sensores para coordinarse, transformar la materia prima de alimentos ingeridos en energía necesaria y conseguir adaptarse, aunque de manera paulatina, a las situaciones más adversas. ¡Que máquina tan perfecta tenemos y necesitamos cuidar!
Aquí están 5 consejos para tu cerebro:
1. Retos.
Se ha demostrado que mantener activa la mente en tareas que involucren la memoria de trabajo como son operaciones aritméticas sencillas o juegos mentales robustece la capacidad cerebral. ¿Acaso no te has dado cuenta que te apoyas mucho en la calculadora para realizar operaciones básicas? ¡Has la prueba y verás resultados!
2. Dormir bien.
Este consejo es el que más disfrutamos los seres humanos porque pasamos más de un tercio de nuestra vida durmiendo. Sean Durmmond, de la Universidad de California en San Diego (EUA), dice que después de una jornada de trabajo de 21 horas, las habilidades de una persona son equivalentes a las de un borracho. Todos en nuestra vida tenemos jornadas o actividades extenuantes que después nuestro cuerpo demanda compensarlo con descanso. Durante el sueño se archivan nuevas memorias, se reactivan circuitos cerebrales y en lo personal considero que durante las horas de descanso el cuerpo se regenera cumpliendo actividades internas a un ritmo cardíaco menor y una respiración controlada.
3. Ejercicio.
Este es otro consejo que disfruto mucho y por lo que recomiendo activarte mínimo treinta minutos al día. Las caminatas de media hora, tres veces a la semana, pueden mejorar tus habilidades mentales como aprendizaje, concentración y razonamiento abstracto hasta en un 15%. A título personal realizar actividades físicas jamás han dado más años a mi vida pero si han magnificado mi salud, tonificado músculos, mejorado mi postura y me permiten lucir la ropa que quiero. ¿Qué esperas? Para caminar solo necesitas ropa cómoda y un par de tenis. ¡Activate!
4. Cafeína y agua.
Un par de tazas de café pueden ayudarte a pensar con más agilidad y eficiencia, pero un exceso entorpece la mente y altera el patrón de sueño, produciendo fatiga. El café y el té contienen taninos que reducen el efecto de otros estimulantes del cerebro como el hierro, hasta en un 75%, así que no más de dos o tres tazas, preferiblemente entre comidas. Si bien es cierto que la cafeína estimula el torrente sanguíneo mediante el bombeo del corazón por otro lado el 70% de nuestro cuerpo es agua y mantenerlo bien hidratado es necesario tomando dos litros de agua.
Algunos beneficios son que provee al cerebro la comunicación mediante neurotransmisores o que permite una clara evacuación en desechos sólidos y líquidos de nuestro organismo. Cuándo nuestro cuerpo pide agua es porque hemos sobrepasado el umbral y quedan pocas reservas. ¿Has visto una orina muy amarilla y mal oliente? Es propio de un cuerpo que tiene poca agua.
5. Vitamina E.
Nombre colectivo de un grupo de compuestos antioxidantes enemigos de los radicales libres. Hoy en día observas comerciales que promueven “drogas inteligentes” o “bebidas voladoras” que mejoran tus habilidades de memoria, concentración y estados de alerta; en lo personal prefiero mantenerme a distancia y evitarlos.
Tanto los fármacos como las bebidas nos invitan a dar un empujón a nuestra mente tomando un par de pastillas o ingiriendo el contenido de una botella. Este punto lo detallaré próximamente en otra publicación titulada "Que son las bebidas energéticas”. Accede también a bit.ly/10EfectosColaterales. Entre los medicamentos existentes algunas personas usan modafinil, para la narcolepsia, con el fin de permanecer despiertos una larga jornada. Otros consumen metilfenidato, indicado para la hiperactividad, pero usado para aumentar la concentración. Mi aconsejo es evitar el consumo de medicamento sintético sin consultar al médico. La ilustración muestra algunos beneficios de ingerir productos naturales.
Da clic en el siguiente material audiovisual para conocer más.
Referencias.
Correa, P. (2009). Cerebro a dieta. Publicación mensual Quo Salud, Ed. Especial, 34-35.